¿Por qué es importante la interoperabilidad entre billeteras digitales para una adopción masiva?

El auge de billeteras digitales (también llamadas billeteras electrónicas/billeteras móviles) está transformando, indiscutiblemente, la forma en que administramos y gastamos el dinero en la era digital actual. Desde el almacenamiento de divisas, están evolucionando hacia la identidad digital, los "bancos de bolsillo", los certificados, los registros de salud, incluso las credenciales como pasaportes, permisos de conducir, identificaciones nacionales, acceso, claves para pasajes.

Mediante el uso de soluciones de proveedores como Bankingly, los bancos, empresas de microfinanzas, cooperativas pueden integrar y ofrecer billeteras digitales a sus clientes para remesas y transacciones transfronterizas más rápidas y ayudar a reducir el fraude financiero. En cuestión de pagos, están a la cabeza. Según el Informe de Pagos Globales 2022de Worldpay, las transacciones de billeteras digitales alcanzaron la asombrosa cifra de 15.900 millones de dólares en 2021, que representaban el 49% de los pagos de comercio electrónico y el 29% del comercio minorista, este último con un aumento proyectado del 39% para 2025, alcanzando casi al uso de las tarjetas que se prevé que sea de un 44%.

América Latina sigue el ritmo de esta tendencia. Las billeteras digitales son el método de pago de más rápido crecimiento en la región y se están convirtiendo en el principal medio de acceso a servicios financieros para millones de consumidores no bancarizados.

Limitaciones y desafíos

Con cientos de opciones de billeteras digitales, la elección también crea complejidad y genera algunos desafíos relacionados. A pesar de su inmenso potencial y crecimiento, la oferta de la billetera está fragmentada a nivel mundial, regional y nacional con varias soluciones que compiten entre sí. Esto significa que el comerciante, los vendedores y los consumidores deben elegir un o un par de opciones que aceptar. Casi todos están restringidos por el bloqueo de los proveedores, bancos o naciones que las emiten.

A diferencia de las redes de tarjeta, (como Visa y MasterCard) las billeteras digitales carecen de un marco universal que sustente las transacciones y no está específicamente diseñado para realizar transacciones transfronterizas o entre billeteras. Los pagos de billetera digital están basados en API, que son únicos. Esto significa que se requieren más recursos de desarrollo para la integración con proveedores de billeteras individuales. Esto hace muy difícil para comerciantes y PYMES del sector financiero acceder a economías de escala, realizar un seguimiento de las API más recientes, gestionar procesos adicionales y requisitos normativos y cumplir con todos los estándares.

En muchos casos, los procesadores de pagos tienen billeteras relacionadas, lo que dificulta la adición de billeteras competidoras a la experiencia de pago. En definitiva, todo lo anterior, conlleva una falta de interoperabilidad, menor versatilidad o funcionalidad, que se puede evitar.

Interoperabilidad: La clave para desbloquear el verdadero potencial de las billeteras digitales

Un factor crítico para garantizar una adopción masiva es la interoperabilidad. Esto permite a los usuarios de billeteras digitales disfrutar de una mayor comodidad, ya que pueden transferir fondos rápidamente entre billeteras o sistemas financieros (como bancos) y países de manera eficiente, sin soluciones torpes, malabares con múltiples billeteras o incurrir en costes adicionales. Además, al permitir a los usuarios elegir, la interoperabilidad promueve una competencia saludable que resulta en mejores servicios, más funciones y menores costes.

Superar los desafíos

En primer lugar, existen barreras técnicas, como la variación de los protocolos de pago y la infraestructura, que requieren alineación para garantizar una comunicación fluida. Además, las complejidades regulatorias pueden surgir de las diferentes jurisdicciones legales y requisitos de cumplimiento.

Por lo tanto, la colaboración entre los proveedores de billeteras digitales, instituciones financieras, reguladores e innovadores tecnológicos es crucial para superar estos obstáculos. Los esfuerzos conjuntos para establecer estándares comunes en torno a los marcos regulatorios pueden allanar el camino para que el ecosistema florezca.

Acelerar la inclusión financiera y la innovación

La interoperabilidad puede resultar en multitud de beneficios. El más importante es la inclusión financiera - al agilizar el uso de la billetera digital, se abre el acceso a los servicios financieros a cientos de millones en América Latina que no están bancarizados o están infrabancarizados. Elimina las barreras creadas por la infraestructura bancaria tradicional y fomenta la innovación, acelerando el desarrollo de nuevas soluciones financieras que satisfagan las necesidades únicas de todos los usuarios.

Un brillante ejemplo de cómo la interoperabilidad beneficia a todos es Bolivia. Trabajando en estrecha colaboración con 10 instituciones financieras locales, Bankingly ayudó a integrar un QR interoperable - una gran iniciativa del Banco Central de Bolivia. Hoy en día, decenas de miles de clientes, comerciantes y sus bancos se benefician de la eficiencia, la reducción del uso de efectivo, la inmediatez de las transacciones y la mejora de la inclusión financiera, gracias a la interoperabilidad. Esto sólo puede suceder cuando reguladores, proveedores de soluciones y bancos trabajan juntos.

El Camino a seguir: Fomentar un ecosistema colaborativo

El futuro es indudablemente brillante. Varios participantes de la industria están reconociendo su importancia y están trabajando juntos. Por ejemplo, la Fundación Open Wallet (OWF), un consorcio global de empresas y organizaciones sin ánimo de lucro, está colaborando para crear una serie de softwares de código abierto que cualquier desarrollador puede usar para crear una billetera portátil, altamente segura, interoperable y multifuncional. Otras iniciativas, como la Fundación Mojaloop, están trabajando para proporcionar un plan para construir sistemas de pago interoperables, y los esfuerzos de colaboración de los bancos centrales que exploran las monedas digitales, muestran el impulso.

Conclusión

La interoperabilidad es fundamental para garantizar la adopción masiva y la transformación del panorama financiero mundial. Para abordar los desafíos con los que se encuentra, es esencial la colaboración entre todas las partes interesadas y la alineación de la tecnología para que funcione sin problemas. Hace que la experiencia del usuario sea más conveniente y estimula la inclusión financiera y la innovación. ¿Quiere integrar y ofrecer billeteras digitales a sus clientes? ¡Hablemos!